Teólogos vs místicos
Abril 2014
Con perdón de la filosofía de no dualidad, dónde hallar la línea de demarcación entre el monoteísmo y el politeísmo. Éste ha sido uno de los campos donde los místicos, tanto musulmanes como cristianos, al menos católicos, se han enfrentado a los teólogos cfr. la inquisición.
Sta. Teresa de Ávila para expresar sus vivencias espirituales de manera vital y no abstracta, necesitó recurrir a la ayuda de vivencias, situaciones humanas de uso corriente, a través de las cuales poder aclarar sus sentimientos, vivencias espirituales más íntimas: arrobamientos, elevamiento, éxtasis. . . Para dar mayor claridad a su vida de oración, de relación íntima con Dios, hecha historia de amistad, recurre, como en este caso de ahora, a la comparación con el matrimonio.
En su época, los jóvenes esposos pasaban por 3 etapas: el concierto, la intención de unirse; los encuentros para conocerse mejor, o desposorio, y la unión transformante de matrimonio
Desposorio Espiritual
Siguiendo los pasos de aquellos jóvenes, en nuestro caso, al comienzo de la oración, el orante muestra su intención de conocer mejor a Dios y Dios, por su parte, está para ello, dando ya comienzo al desposorio espiritual, al conocimiento de Dios cada vez en mayor profundidad, que enamora y acelera la fidelidad responsiva del orante.
El Esposo, Dios, quiere que el alma le entienda más. El alma ve quién es ese Esposo. De esta visión del Esposo el alma queda enamorada, que hace, por su parte, lo que pueda para que no se desconcierte este divino desposorio. Según Teresa ya aquí Dios: ´coge el alma para sí y llévala consigo.´ ´Roba Dios toda el alma para sí ´– acción violentamente amorosa que produce un centrarse de todo el ser del orante en Dios.
Soledad extraña de todo, soledad que nadie sino el que ama puede llenarla, (como en el caso de los jóvenes desposados.) Correspondencia entre la donación de Dios y aceleramiento de la parte humana. Recomienda a sus monjas que, ´puestos los ojos en su premio y viendo crecer sin tasa su misericordia… corramos encendidas en su amor.´ Todo es para más desear y gozar del Esposo. Y Dios corresponde con su gracia para que el orante llegue a tomarle como tal. Los efectos de estas gracias místicas van todos en dirección del conocimiento de la verdad por vías de amor y comunión. En definitiva el desposorio espiritual es una intensa y profunda preparación para el matrimonio espiritual. Comenta que, de hecho entre los dos estados la puerta está abierta.
Matrimonio espiritual.
El proceso llega a su plenitud, el movimiento de interiorización ha culminado en el centro del orante – la morada de Dios – donde descubre algo inefable. Apenas se balbucean unas palabras y fallan también las comparaciones – (relacionado con el claimax?) Queda el espíritu de esa alma hecho una cosa con Dios. Queda siempre el alma con su Dios en ese centro. Solo Él y el alma se gozan en grandísimo silencio. (San Pablo en su carta a los colosenses afirma: Dios es Todo en todo. S. Juan en su evangelio17,21: “Que todos sean uno, como tú Padre en mí y yo en ti, que ellos también sean uno en nosotros. Puede dar la impresión de que somos parte integrante de la naturaleza de la Trinidad y de alguna forma sin llegar al politeísmo[p1] , por mucho que yo sea tú. Razón por la que la inquisición se enfrentó a St. Teresa, a San Juan de la Cruz, y oros más.)
Presencia total que compota por parte del orante, presencia también total a los hombres. Presencia de servicio. Los deseos de morir para gozar de Dios, se convierten en deseos de servirle mejor en los hombres. La fuerza y calidad del servicio está en el amor de estas almas, o en la unión misma tan estrecha con Dios. Perfecta y plena comunión. (San Pablo comenta esa misma vivencia, llegando a la misma conclusión)
Las vocación del hombre es divina, el arribo a la última morada, al núcleo más íntimo del ser. Activación de todos sus dinamismos. (S. Agustín confiesa: Nos has hecho para ti y nuestras almas solo descansarán en ti. S. Pablo a los filipenses: Él – Jesús – transformará nuestra humilde condición según el modelo de su condición gloriosa)
NB: nada de lo expuesto, excepto lo señalado entre paréntesis, es cosecha propia de orante. Todo está cogido, casi palabra por palabra del libro: Oración historia de amistad -Maximiliano Herraiz García pg. 96-99)
Sacramento del Matrimonio
Ya fuera del libro arriba mencionado, entrando en el sacramento del matrimonio, éste comporta una identidad propia respecto a los demás sacramentos.
En los otros 6 sacramentos el sacerdote es el ministro que los administra. En el del matrimonio, son los propios contrayentes los que se lo administran, basado en el amor mutuo.
El sacramento consta de dos partes: RATO y CONSUMATO, igualmente válidas.
La primera consiste en las normas litúrgicas a seguir: altar, sacerdote- como testigo de la Iglesia – los testigos, firmas, declaración de intención: sí, quiero. . . hasta que la muerte nos separe. . .
Al salir de la iglesia, aún no están sacramentalmente unidos. Queda la segunda parte, el CONSUMATO, que consiste en la primera unión carnal entre ellos, siendo Dios el único testigo, unión que podría ser la firma y sello espiritual del sacramento. Ya no son dos sino uno.
Leía que, para el matrimonio cada encuentro a ese nivel carnal a lo largo de sus vidas, tendría que ser una renovación de las promesas del día de la boda.
Dios ha incluido el encuentro sexual en la esencia del sacramento, haciendo que ese encuentro se transcienda a sí mismo, se divinice. Que lo que Dios ha unido. . .
Tanto en la Iglesia como en la cultura actual, tenemos un largo camino por delante armonizando el sexo en la creación como en el espíritu. Hemos conseguido hacer del sexo un tabú; por otra parte, muchos de esos encuentros, ni siquiera tienen el valor de un abrazo amistoso.
Ángel