SOLUCIÓN A LA EMIGRACIÓN

SOLUCIÓN A LA EMIGRACIÓN

“No necesitamos dueños, necesitamos socios” Hibrahim Traore.

Poetas, intelectuales de origen africano  en los años de 1930, reunidos en París, presentaron la Negritud como un grito a  favor de los valores culturales africanos, siendo al mismo tiempo una protesta contra el colonialismo y el racismo. Esta filosofía, a día de hoy,  está siendo actualizada por líderes africanos.

La ayuda extranjera es más incierta que las lluvias a su debido tiempo. Con todo, estos líderes apuestan por la lluvia, por la Naturaleza, antes que por la ayuda.

Cuando llegué a Tanzania el año 1970 existía la Comunidad del Este de África: Tanzania-Kenia-Uganda. Existen algunas comunidades en el Sur de África. . . Con sus fallos, pero se hacían oír. Hace tiempo que se comenzó a hablar de abrir el comercio africano al interior de África, libre de fronteras. Ahí estaba,  en el área de “objetos olvidados”: nadie lo reclamaba.

Ibrahim Traore, Presidente de Burkina Faso, un joven militar, con rango de capitán, viendo que el oro de su país: 30.000 barras, quedaba confiscado en almacenes franceses, esperando, como se les decía, al proceso burocrático: control de calidad, certificado de origen y demás requisitos. . . lo que a él le llegaba como que, Francia, dueña de la situación,  necesitaba su tiempo para fijar precios, tanto de compra como de venta. Traore decidió salir del sistema monetario del dólar y vender el oro directamente a India, con precio estipulado localmente. Nacionalizó las 5 compañías de oro, así como otras empresas.

Al mismo tiempo, se ha atrevido con lo imposible: la agricultura en el desierto: 15 millones de  bananos; 100 quintales de maíz, arrojados desde helicópteros de ejército; millones plantas de cacao; 10 millones de gansos etc.

Todas sus iniciativas han sido duramente criticadas, condenadas, ridiculizadas desde Occidente.  Ha sido considerado ser  un populista a todos los niveles posibles. La primera iniciática fue la de los bananos, que por falta de agua fracasó. A pesar de toda la crítica internacional, ante su población, con su habitual serenidad, les dijo que no todos los proyectos funcionan a la primera. . . y así, contra corriente, pero firme, siempre con el apoyo de la población y el ejército,  continúa con  otros proyectos, con la actitud de: errar y aprender- nunca echar la toalla.

Aprendieron del fracaso; buscaron otras variedades más resistentes, combinaron técnicas modernas con sistemas de recogida de aguas aportados por ancianos.

Todos estos programas fueron expuestos a la población; los soldados contribuyeron con picos y palas. En el  campo comienza a haber acceso al regadío; se han creado posibilidades de trabajo, aprovechadas por mujeres y jóvenes, con cooperativas, talleres; las universidades apuestan por lo relacionado con el campo: regadíos, a semillas, ganado. Energía alternativa.

La educación tiene que brotar del interior de la Tierra.

Los niños pueden desayunar antes de ir a la escuela y cenar antes de dormir, combatiendo la desnutrición. Por doquier el estribillo de los jóvenes: NO NECESITAMOS EMIGRAR. Antes lo tenían que hacer obligados por la globalización, no emigraban por tener una aventura.

He aquí la cultura de Occidente: Nuestra globalización les obliga a emigrar y nuestras fronteras, con muchos de la población de a pie, los rechazan de mala manera.

Mandatarios de  países africanos y de otros continentes, valoran su trabajo. Mali y Níger también expresaron cómo su oro quedaba confiscado en Francia. En agosto del 25, junto a Burkina Faso, formaron una Confederación. Los 3 países no tienen salida al mar.

En un encuentro de líderes africanos en la sede de la Unión Africana, en Addis Abeba,  había ya varios países en su línea. Otros muchos quedaron impresionados.

El FMI internacional suspendió las ayudas a Burkina Faso así como  instituciones industriales y otras. Traore nunca se escondió ante un fracaso, siempre lo defendió ante la población: “mejor libre  descalzo que rico con zapatos,  sometido.” A pesar de los cortes de ayuda y demás contradicciones, incluso nacionales, consiguió el apoyo de la población. Y aún hoy la población sufre con tanto corte, sabiendo que la fe que tienen es más fuerte que lo que se les deniega.

El FMI para aceptar cualquier demanda de ayuda, exige una reestructuración del presupuesto público, lo que conlleva la privatización en la salud, la educación, electricidad, bancos, transporte, líneas aéreas  etc.  Una de estas ayudas, de hace dos años, salvó, en última instancia, la economía de Addis Abeba. ¿A qué precio? ¿Qué ocurrirá con el oro de Tigray?

Burkina, Mali, Níger han cortado radicalmente con Francia, con serias repercusiones en su economía; no tiene acceso directo al oro, al uranio, al litio al. . . Occidente, especialmente Europa, cuna de colonizadores, reacciona con castigos económicos. Ante la intransigencia de Occidente, India ofrece a Burkina Faso profesionales, Rusia refinadoras, China préstamos en yenus para gestionar la deuda externa.  Y Occidente, la lumbrera de la Humanidad y la Naturaleza, extrañada de tanta ingratitud,  se echa las manos a la cabeza al ver que abren las puertas a naciones del Este. Ellos ven SOCIOS.

En todo este proceso, con el ejército en primera fila, no se han visto galones, ni siquiera un tirachinas. Se puede. El Presidente decía, “no hemos plantado bananos, hemos plantado dignidad-un banano es un soldado contra el hambre y la dependencia.”

La Soberanía, decía, algo así como: consiste en construir su propia identidad como nación y colaborar con los vecinos.

Comienza a haber industria local; ya se ofrece al mercado productos sencillos, pero: made in Ghana; made in África. El oro burkinés exhibe: producto de  Burkina Faso.  Poco, pero se exporta.  La economía Occidental tiembla y comienza a pedir que se pongan todo tipo de restricciones al comercio africano. Criterio motriz africano: que la materia prima continental cree riqueza en África, sin estar sometida  a bancos y demás instituciones Occidentales que se llevan la riqueza del suelo africano.  Se ha comenzado la construcción de empresas, refinaras, escuelas, hospitales. . .

En un trabajo de inspección pedido por Traore a economistas, abogados,  auditores, en los despachos del gobierno, encontraron con que el oro salió con un 30% más bajo que su precio.

La nueva política de no enviar materia prima que no haya sido procesada en África está en auge. Comienza a haber refinarías, así como independencia en el poder comercial. Cuando la economía africana,  dado el potencial de recursos, actúe de acuerdo a sus propias normas,  en sistemas paralelos al dólar,  no será del todo extraño que nietos de los políticos españoles que dictan esta contracultura, tuvieran que emigrar a África. Creo poder asegurar a estos abuelos de mañana, que sus nietos no tendrán necesidad de echarse al desierto ni a las pateras; no se les acogerá con concertinas ni perros. Es de sobra conocida la crítica contra estos jóvenes africanos, aún machacada últimamente por uno de los políticos de esta contracultura: “se llevan nuestros trabajos; se les paga mejor que a los nacionales; no quieren trabajar.” Se sigue presentando como nuevo este criterio de hace años: “los emigrantes no están interesados en nuestra cultura y hay que echarlos.” Y como algo nuevo, desconocido, es calurosamente aplaudido, cual torero con el trofeo de una oreja.

También creo por asegurar a estos próximos abuelos, que sus jóvenes nietos  no se verán enfrentados a homólogos suyos,  a jóvenes africanos, enfervorizados ante el grito: “a la caza”. Estos jóvenes nacionales con ese  civilizado grito,  y fieles a la cruz en su logo, recuperan nuestras calles de los violentos kaleborrokas.  

Deuda externa, deuda enferma. Hay naciones que, solo en intereses de esa deuda ficticia, tienen que pagar más de lo que suponen sus presupuestos en educación y sanidad. Es una deuda que cada vez aprieta más la yugular de la economía africana. Sus intereses a pagar llegan al 9% del presupuesto anual, cuando en Occidente anda por el 2%.

Necesitamos a África pobre, dependiente, “necesitada de la muleta – la ayuda de Occidente – que le permita moverse.”  Se les da la mano para protegerles de nuestras zancadillas; de la mano los llevamos a arenas movedizas y los sacamos de ellas agarrando  su brazo extendido. La NOBLEZA no es parte de la cultura española, ni la de la economía Occidental.

¿Aceptará Occidente personas como Traoré? Como no recordar a Lumumba, Sankara – aunque fuera su mejor amigo quien apretara el gatillo. Ha habido atentados contra Traoré.  Lumumba ante el rechazo de Occidente recurrió a Moscú, y fue tachado de comunista – así se escribe la historia. Del cuerpo de Lumumba, contra a voluntad de los asesinos se salvó un diente. En casa lo recibieron a los 50 años de su asesinado, y con el cariño y el calor de todos sus parientes, en terreno familiar, fue enterrado en casa.

¿Se aceptará el ritmo lento del desarrollo sin caer en tentaciones de poder, corrupción? Estará la gobernanza africana a la altura de las necesidades?

Diplomacia.

El año pasado, correspondiendo a España la presidencia de la Cumbre Comercial Europa-África, en el encuentro celebrado en el Palacio del Pardo, el Jefe de Estado en su discurso protocolario inaugural, aprobado por la Casa Real y el Gobierno, expuso la necesidad de cumplir con los proyectos, ya en marcha, aceptados por ambas partes. . .

Acto seguido, el representante de la Unión Africana, invitó  a Ibrahim Traore, Presidente de Burkina Faso, a subir al estrado. Traore, después de cumplir con la parte protocolaria, comentó la existencia de proyectos firmados por gobiernos corruptos que,   necesitarían ser revisados, mencionando que ha habido acuerdos sobre el oro, en los que Occidente se ha quedado  hasta con el 95% del beneficio. En el contexto protocolario, en el que nadie debe de pasarse de la liturgia oficial, su exposición hizo cambiar el ambiente del encuentro.  Su comentario fue viral, la Casa Real, en pleno, buscaba una salida oficial; había reacciones de gobiernos a nivel mundial. La cumbre había perdido todo protagonismo.

El Jefe de Estado, propuso tener un encuentro, a puerta cerrada, con el Presidente Traore, que fue aceptada. (No fue necesaria la presencia de un traductor, dado que el castellano del Presidente es muy bueno) Por el comunicado del encuentro, éste debió de ser cordial, abierto. Ambas partes aceptaban: que se procedería a una revisión de contratos en cuestión; que los acuerdos, aceptados por ambas partes, fijarán precios y beneficios correspondientes. . . Y la Cumbre recobró su espíritu.

Como habitual en Traore del encuentro salió con la serenidad que le caracteriza, como si nada hubiera ocurrido. Se comunicó que el Presidente invitó al Jefe del Estado a visitar Burkina Faso. Felipe VI aceptó la visita. Durante la misma le llevarán a las minas nacionalizadas, a los desiertos cultivados. . .

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Unas reflexiones: La serenidad e integridad de una persona supuso más que todas las normas protocolarias universales. A esa persona, la población humillada por tanta injusticia comercial, le motivó a hacer esa demanda a favor de tantos millones de empobrecidos. Traore sabía que no iba en su nombre propio, sino representando a la población burkinesa, además de a la población africana en su totalidad. Hablaba en nombre de África, aunque no hubiera sido nombrado para ello, otorgándose ese mandato, teniendo en cuenta la situación única del momento.  No buscaba VOTOS.

Si Traoré hubiera insultado, gritado, su discurso hubiera sido rechazado, no hubiera llegado a los participante en el encuentro.  Al contrario encontró la aprobación de muchos de ellos. Más que rechazado, es una guía Internacional.

Políticos nacionales, entre insultos, gritos, mentiras, piden que los jóvenes africanos que no aceptan nuestra cultura sean expatriados. ¿Saben de dónde y en qué condiciones llega nuestra riqueza?

¿A que cultura se refieren? A la franquista? ¿Cuál es la cultura que nos llega a través de sus desencuentros parlamentarios? ¿La que nos llega a través de sus partidos políticos?  ¿De tertulias televisadas? TODO MENOS SERENIDAD. Cuanto más grita uno, menos le preocupan los principios.

NOBLEZA OBLIGA, de ahí en adelante la cultura.

Ángel                                                                                                                                   Octubre 2025

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