Coronavirus y Apocalipsis
De entrada: El coronavirus no tiene nada que ver con la literatura apocalíptica
del libro del Apocalipsis de San Juan, ni éste tiene nada que ver con el fin del
mundo.
Algunas aclaraciones sobre el Apocalipsis:
Apocalipsis es una palabra griega que significa revelación. El autor del libro
recibe las revelaciones en forma de visión – el vidente – y las transmite, a su
estilo, en un libro. Los profetas escuchaban esas revelaciones y las
proclamaban. Hay una relación íntima entre el género literario de los profetas
y el apocalíptico.
En la Biblia la literatura apocalíptica se utiliza cuando los creyentes están
sufriendo calamidades, persecuciones por causa de su fe, y el autor acaba su
relato con una nota de esperanza para los creyentes: al final Dios triunfará.
Toda la terminología de calamidades, muertes, aguas cambiadas en sangre,
estrellas cayéndose, sol y luna perdiendo luz y calor; langostas, caballos y
arcos, subidas exageradas de precios de la comida. . . medios con los que el
vidente relata la visión pensando en lectores, los creyentes a quienes iba
dirigido al libro. San Juan no pensaba en nosotros, ni en el fin de mundo. Sólo
en las comunidades que entonces sufrían, especialmente en Roma.
Mateo 24, 29-31, haciéndose eco del sentir de los profetas, hace una sola
referencia a ese tipo de literatura, anunciando toda una serie de catástrofes
cósmicas: Sol y la luna se oscurecerán, caída de estrellas sobre la tierra. . . con
el añadido de Jesús “Yo os aseguro que no pasará esta generación, hasta que
todo esto suceda” Según los exégetas, Mateo hacía referencia a la caída de
Jerusalén el año 70 y no al fin del mundo. Para aquella sociedad de los profetas
de hace ya 3000 años y más, que aun no creyendo en la vida eterna y para
quienes existían muchos dioses con sus templos y seguidores, todo lo que
pudiera interferir con el plan de Dios, sin más, era solo comparable a estas
catástrofes cósmicas. Y a todos los que sufrían esas persecuciones los
podríamos poner en un campo de fútbol de tercera división – perdón por la
comparación.
El vidente interpreta su visión utilizando figuras como: los Seres, Jinetes,
Caballos, Ancianos, Animales, Números, Ángeles, Trompetas, al Cordero
abriendo los Siete Sellos. . . elementos, todos ellos, con un valor simbólico.
Supongo que para muchos será conocida la película: “El Séptimo Sello”. De
todos los símbolos ya mencionados, haremos una pequeña revisión sobre los
Siete Sellos.
El relato sobre los Sellos, capítulo 6, comienza sin más: “Seguía mirando,
cuando el Cordero abrió el primero de los siete sellos. Oí al primero de los
cuatro Seres que decía con voz de trueno: ´Sal´ Miré entonces y había un
caballo blanco. . .´”
Al abrir el primer sello el vidente ve un caballo blanco y el jinete que lo
montaba llevaba un arco en la mano. . .Blanco símbolo de la victoria, designa a
los partos, inconfundible por su arco, que les hacía el terror de los romanos. Al
abrir el segundo sello: ve un caballo rojo, el que lo montaba tener poder para
que se degollaran unos a otros. Con el tercer sello ve un caballo negro, con una
balanza en la mano – símbolo de la muerte, dado que los artículos de la cesta
doméstica se estaban racionando y llegando a precios exorbitantes – la gente
no tenía acceso a la comida. El caballo que ve en el cuarto sello es de color
verdoso, el que lo montaba se llamaba Peste y el Hades le seguía – se le dio
poder sobre la cuarta parte de la tierra, para matar con la espada, el hambre. .
. Quinto sello: las almas de los degollados a causa la Palabra de Dios. . .
´entonces se le dio a cada uno un vestido blanco (símbolo de victoria) y se les
dijo que esperaran un poco hasta que se completara el número de los
consiervos y hermanos que iban a ser muertos como ellos´( en castellano
castizo: “ el que avisa no es traídor”), Con el sexto sello se produjo un violento
terremoto, el sol se puso negro, la luna como sangre y las estrellas del cielo
cayeron sobre la tierra. . . “el cielo fue retirado como un libro que se enrolla”
–lugar para la poesía. Y todos los montes y las islas removieron sus asientos. . .
En una nota en La Biblia de Jerusalén, relacionada con todas estas
calamidades, indica que están encaminadas a la destrucción del imperio
romano: Ap 6,14:” Todas estas señales cósmicas son tradicionales en la
literatura profética donde acompaña al Día de Yahveh (Am 8,9+) No hay que
interpretarlas como realidades físicas, sino como símbolos de la cólera de
Dios”(En “Los Árboles Creen en Dios”, se lee ´En Madrid no había tierra para
enterrar a sus muertos´” – entendemos que es un tipo de género literario,
haciendo eco de un hecho histórico de proporciones insospechables).
Después del Sexto Sello, aparece un Ángel que tenía el sello del Dios vivo. . .” Y
oí el número de los marcados con el sello. Ciento cuarenta y cuatro mil,
sellados de todas, las 12 tribus de Israel. . .” (Doce es un número comunitario
sagrado, perfecto; 1000 significa muchedumbre: 12x12x1000 =144.000,
símbolo de la comunidad perfecta, – la cuarentena podría ayudarnos a
entender este tipo de literatura: hay cuarentenas que duran 2 días, otras 15,
otras. . . La duración no tiene en cuenta los 40 días originales de la
cuarentena). Y acto seguido se habla de una muchedumbre inmensa, que
nadie podía contar, con vestiduras blancas y palmas en las manos,
provenientes de la gran tribulación y que han lavado sus vestidos con la sangre
del Cordero. Otra parte de los vencedores.
Y aparece el Séptimo Sello, acompañado de las Trompetas, a cuyos sonidos,
cayó pedriscos de fuego y sangre, y la tercera parte de la tierra quedó
abrasada, toda yerba quedó abrasada. . .la tercera pate del mar se convirtió en
sangre. . .Se abrió el pozo del Abismo y subió del pozo una humareda como la
de un horno grande; de la humareda aparecieron langostas. . .cuya apariencia
era parecida a caballos. . . Y tocó el séptimo Ángel y una fuerte voz en el cielo
decía: “Ha llegado el reinado, sobre el mundo, de nuestro Señor y su Cristo y
reinará por los siglos de los siglos.” Por fin, la victoria de Dios!
Hay que tener mucha, mucha fe en Dios, una vivencia muy íntima de El para
creer que ése, el Corazón de Dios, es el lugar de honor, el lugar de la victoria de
todos ellos. Y ese es el mensaje de la literatura apocalíptica.
En tiempos de los apóstoles los cristianos sufrieron persecuciones por los
emperadores romanos: conocidas las de Nerón, quien acusó a los cristianos de
quemar Roma, Diocleciano. . . la vida en las catacumbas, el Coliseo. Los
cristianos se preguntaban lo que podría significar la promesa de Jesús: “No
temáis he vencido al mundo”; y San Juan los anima a no decaer en la fe en
medio de todas las persecuciones y martirios. De ahí esa referencia a los
144.000 – que posiblemente los degollados, los mártires, no pasaran de 3.000.
Se supone que en tiempos de Nerón no llegaban a 200 los cristianos en Roma.
La población de Palestina, Babilonia. . . de los tiempos de los profetas, de hace
3000 años, los judíos tampoco serían más de 3 millones. En el contexto de esa
población, en especial por falta de esa justicia hacia el pobre, la literatura
apocalíptica se despachó a gusto.
Actual “Apocalipsis” hecha a nuestra imagen
Con todo el respeto, miedo, incertidumbre, angustia que el coronavirus está
creando en el mundo, el Occidental incluido, no está de más que
aprovechemos la situación “apocalíptica” que se nos está presentando, y la
sopesemos en el contexto de la que millones de persona llevan sufriendo los
últimos 30 años y más.
Aun sabiendo que nuestra situación social, salubre actual no tiene nada que
ver con la del Apocalipsis, queda la curiosidad de la posible analogía entre las
dos situaciones: ese, sí, pero no; no, pero sí.
Sin necesidad de entrar en detalles sobre la situación actual de nuestro
planeta, tenemos al menos información, no asimilada, sobre la mala
condición del mar en la actualidad que en unos pocos años posiblemente
tenga más volumen de plásticos que de peces (según El Apocalipsis, el mar
convertido en sangre); el aire polucionado; la próxima escasez de agua; lluvias
ácidas; el mensaje de la joven Greta. En varias ocasiones hemos podido leer: si
la situación no cambia antes del 2050, nos hallaremos en una condición de no-
retorno; también se dice que somos la primera generación capaz de darle la
vuelta a esta situación caótica y hacer que la comida llegue a todos, mejorar el
clima. . . Y que si no lo hacemos seremos la última generación sobre la tierra: –
“Apocalipsis” de guante blanco.
Si las naciones siguen cerrando sus fronteras, confinando a los habitantes al
interior de sus 4 paredes familiares, que para algunas personas pueden ser
comparables a las de una prisión, aunque sea prisión de 5 estrellas, pronto los
precios de la comida llegarán a alturas insospechadas, como bajo el Tercer
Sello de San Juan en su libro.
Con la actual política universal de “sálvese quien pueda”, cerrando las
fronteras de nuestras propias “jaulas de oro”, se está preparando a la gente a
que vean en el otro un enemigo potencial y si el virus sigue imponiéndose,
hasta mis más próximos, esos que llamamos “mis seres queridos”, serán
enemigos potenciales; con la excepción de algunos padres, abuelos,
anteponiendo la salud de sus de sus hijos, nietos a la de ellos. Ni el haber
cerrado las fronteras tendrá sentido alguno.
Ha habido decenas de reuniones de todos los mandatarios mundiales para
tomar decisiones sobre los Derechos Humanos; Derecho a la Alimentación; a la
Emigración, los Objetivos del Milenio. . . que pocas veces, si alguna, han tenido
seria relevancia ¿No sería una oportunidad única que volvieran a reunirse los
actuales mandatarios, con una actitud más humilde, ante un simple virus, en
un tipo de mesa redonda y desde la serenidad, se planteen como ir
avanzando? Serenidad que también se echan en falta en los políticos
nacionales, sean del color que sean. Da qué pensar que los políticos de un país,
no tengan esa serenidad, cordura, para que, dejando logos y colores, se
sienten y entre todos produzcan un plan único y dejen de gritarse, insultarse,
presentándose con el baluarte del único partido capaz de solucionarlo.
No cabría la posibilidad de que laboratorios nacionales que trabajan el tema,
en turnos de 24 horas, estén entre ellos comunicados y todo pequeño avance
llegue a todos por igual? O es un privilegio de los laboratorios privados?
Si la población con mayor riesgo somos los que estamos por encima de los 65
años, no cabría la posibilidad de crear una prenda cómoda – siguiendo el
ejemplo de los surfistas, por ej.- de un material que repele al virus, que nos
aísle de todo posible contacto, y el resto de la población siguiera su curso
normal?
Seguro que en el mundo hay suficiente conocimiento, saber hacer, como para
enfrentarse a esta pandemia de manera más sencilla y humana. Los ecos que
nos llegan de familiares y amigos son muy preocupantes, casi casi, como que el
remedio, si no ofrece otra alternativa, pueda llegar a ser peor que la
enfermedad. Debe de impresionar ver las calles cogidas por el ejército. A los
pocos viandantes solo les queda ir con una campanilla, como cuando se
anunciaban los leprosos. Personas sin capacidad de estar 24 horas diarias
consigo mismas, encerradas entre sus 4 paredes. Y otros detalles como la
economía, los puestos de trabajo ya perdidos. . .
Según UNICEF el 13-03-20 los fallecidos, a nivel mundial por el coronavirus
eran casi 5.400 y los afectados más de 144.000. Y creo que, a día de hoy 16-03,
en el Estado Español está entre las 600 muertes, la mayoría por encima de los
80 años y los 8.000 afectados. A día de hoy, 20 de Marzo, podríamos añadir
5.000 muertes más.
Como reaccionaríamos si diariamente alrededor de 180.000 personas murieran
debido al coronavirus? Llegaríamos a todo lo que la imaginación pueda dar –
imaginación que ahora se nos queda pequeña.
Lo inhumano de nuestra situación actual es que diariamente mueren esa
cantidad de personas – las 180.000, por falta de una alimentación, medicación
y medidas de higiene mínimas; agua potable. . . y esto no lo debemos a
enemigos, ni a Trompetas, Sellos, Jinetes. . . aquí tenemos el honor de
declararla cosecha propia, no algo que se nos ha escapado de las manos. Hasta
ahora hemos sido muy selectivos en cerrar las fronteras a los habitantes de
muchos países, no así a la riqueza material que espoliamos de sus mismos
países. Muchos de ellos son africanos, hijos del Continente más rico de todos
en materias primas y otras. Lo malo para ellos es que el hambre no es
contagiosa. Si lo fuera como el virus actual, hace tiempo que se le hubiera
encontrado la solución. Es triste tener que decir que el hecho de que
Occidente esté en el ojo de la tormenta, nos tranquiliza: saldrán de la tormenta
y África con ellos. Pero las 180.000 personas que mueren diariamente, porque
les falta un euro diario para comer y poco más, seguirán siendo ignoradas.
Según UNICEF “Lavarse las manos con agua y jabón es una de las cosas más
baratas y efectivas que se puede hacer para protegerse y proteger a otros
contra el coronavirus. . . Incluso este paso más básico está simplemente fuera
de su alcance” Esta misma semana el Director del Centro de Salud de Wukro,
nos ha presentado una solicitud de ayuda para proveer a 500 familias con dos
piezas de jabón cada una por alrededor de 450€, así como 120 € para 50 litros
de alcohol, también por razones de higiene de manos. (Ayuda concedida)
UNICEF, en ese mismo despacho comunicaba que: un total de 3.000 millones
de personas, el 40% de la población mundial, no tiene cómo lavarse las manos.
Y esto no es ya en sí una situación apocalíptica???
Si el coronavirus lleva unos 3 meses atacando a la humanidad y en ese tiempo
han muerto las personas arriba indicadas, en ese mismo tiempo, según
estadísticas de la ONU. por falta de esas necesidades más básicas arriba
indicadas, han muerto unas 16.200.000 personas. Con todo las casi 5.400
personas que han muerto acapara la total atención, preocupación, programas
de seguridad del mundo Nos siguen preocupando más las casi 5.400 personas.
Posiblemente algunos recuerden las caras angustiadas de muchos de nuestros
políticos el año 2000, cuando hablando de los Objetivos del Milenio, nos hacían
ver la obligación que teníamos de apoyar a los más pobres. . . Se llegó a oír de
un alto mandatario internacional: “si un niño muere de hambre, muere toda la
humanidad” – ni titubeó ni se sonrojó. Su muerte puede ser muy lenta;
llegando al estado de que ya no puede comer ni sostener su cabecita así como
para los ancianos que se van consumiendo. Situaciones muy dolorosas, pero a
diferencia de las de hoy ahí, en las que nunca faltan ni el abrazo ni el calor
humano – lo único que dignifica esas muertes.
Del Milenio hace ya 20 años y ya años antes del 2000 se hablaba de esas
180.000 muertes, que hay quienes las consideran crímenes contra la
humanidad – Muertes? Crímenes?, Y qué? Qué más da! Se mueren ellos.
El resultado de esta sencilla multiplicación de: 180.000x365x20=1.314.000.000
muertos- no es lo suficientemente apocalíptico? Pero hemos
hecho de ella solo una cifra. Las 5.400 del coronavirus son personas con cara e
historia, y más personas cuanto más cerca estén de mí, que en definitiva, casi,
casi soy la víctima del virus en cuestión que más me preocupa visceralmente,
con la excepción arriba indicada.
Se ha oído decir que se trata de un reajuste natural de la Naturaleza
preocupada por la sobre abundancia de personas. Posiblemente la Naturaleza
esté reajustando de nuevo este crecimiento demográfico y haya decido invitar
a los ricos a hacer parte de él. No tiene que ser por qué ser un privilegio de los
pobres. A todos nos corresponde ese honor de mantener el equilibrio
demográfico.
Dios no lo quiera, pero si esta condición se mantiene en Occidente durante
algunos años, estando, hoy por hoy, África casi libre de esta pandemia,
comenzaría el éxodo de millones de Occidentales a África. Una estrategia digna
de Occidente, sería la de mantener África libre del virus y si llegara el día en
que Occidente estuviera fuera de control, así tener un lugar en el que vivir a
salvo. Y sabrían cómo mantener todas las fronteras africanas abiertas para
estos migrantes de calidad.
No por nada Occidente tiene derecho a eso y a más – y que se enteren los
migrantes pobres de ahora y no nos molesten más. Allá ellos con sus pateras!
Ángel
A GRANDES MALES GRANDES REMEDIOS
Después de la Segunda Guerra Mundial se organizó la ONU y todos los demás
departamentos bajo ella, el Banco Mundial y el Fondo Monetario
Internacional, Consejo de Seguridad. . . No faltaba nada para asegurar la paz, la
estabilidad, el desarrollo mundial.
La ONU con todo su poder económico no cuenta con un poder
CONSTITUCIONAL a nivel mundial que le de poder, por encima del político,
militar y otros que puedan existir, para implementar la práctica de la
hermandad de la Creación, donde personas, animales, plantas, aguas, aire. . .
formamos una sola familia.
Las instituciones bajo el paraguas de la ONU, con los banco ya mencionados,
UNESCO, UNIUCEF, la FAO. . . cuentan con un presupuesto inimaginable para
los de a pie.
Graham Hancock, en su tiempo miembro de ese gran complejo mundial, el año
1989 publicó “The Lords of Poverty” (Los Lores de la Pobreza), en cuya
contraportada escribe: “60.000.000.000 de dólares – traducción personal:
Cada año, las facturas mundiales para toda ayuda oficial las pagan las naciones
más ricas. Nosotros, la gente ordinaria que paga los impuestos, contribuimos
con una cierta satisfacción – pensando que el dinero llegará a los más pobres.
Pero no es así.” Y ahí se despacha en todas y cada una de las 193 páginas del
libro.
Con información, datos oficiales va desgranando el indebido uso de ese dinero,
entre personas pagadas, “preparadas”, según él, bastantes de ellas incluso
incompetentes, para su distribución, asegurando que, en ocasiones hasta el
90% de esas ayudas queda en el presupuesto de personal de miembros del
complejo MADRE desmadrado.
Añado un último un megaproyecto – al menos para nuestro nivel
presupuestario- de la ONU: durante los próximos 10 años, comenzando ya por
éste, se va a desarrollar el proyecto “Agricultura Familiar”. Hemos pasado ya
por “Desarrollo Sostenible”, “Agricultura para el Desarrollo”; los Objetivos del
Milenio. . . Este proyecto comienza ya con grandes reuniones, contra
reuniones, reuniones de por si acaso, a nivel internacional. . . – no pretendo
ser sarcástico – que se llevará el 70% del presupuesto.
(Un autor muy excepcional a tener en cuenta para intuir, incluso saber, lo que
puede pasar al interior de nuestra Institución Madre, el Dr. Jean Ziegler:
Relator especial de la ONU para el Derecho a la Alimentación (2000-2008)
Actualmente, vicepresidente del Comité Asesor del Consejo de los Derechos
Humanos de las Naciones Unidas, tiene publicados: Los Nuevos Amos del
Mundo; El Odio a Occidente; El Imperio de la Vergüenza; Hay que Cambiar el
Mundo. Últimamente, a sus 85 años ha publicado otro sobre la migración. Así
como varios más, entre ellos, siendo el mismo suizo: Suiza Lava más Blanco)
La Constitución etíope incluye una SOCIEDAD CIVIL apolítica, elegida por el
vecindario y entre el vecindario que es la que inspira y decide el uso del
presupuesto del año fiscal. No tiene poder para elegir al alcalde, por ejemplo,
pero sí para aceptar o rechazar al nombrado por el Partido. Y tiene derecho
para echar al alcalde de su puesto, si no anima el desarrollo de la ciudad y
mucho más si estuviera involucrado en corrupción. Cuenta con un Parlamento
de 220 personas, los arriba elegidos, de las que solo 6 tienen sueldo, dado que
están empleados a tiempo completo. Los habitantes de todos los
ayuntamientos y similares, por derecho Constitucional, pueden formar ese
parlamento. (Allí donde no funcione es por falta de compromiso de los propios
habitantes)
Seguro que de este modelo no se podrá hacer un “copiar y pegar”. Pero puede
ser una alternativa para que, en nuestro caso, a un nivel mundial, surja una
Institución, algo, que esté por encima de los poderes políticos, militares,
económicos, religiosos.
Si seguimos con este monopolio actual, al que se ha unido todo el mundo de la
informática, con su memoria artificial y otros súper adelantos, podremos salir
de este virus, pero posiblemente lo tengamos mucho más difícil con el
siguiente.